La química cerebral nos predispone a estados mentales específicos y la depresión es uno de ellos. Es un proceso fascinante y complejo, en el que cualquier desequilibrio, cualquier cambio en los neurotransmisores puede hacernos sentir la mayor motivación, pero también la tristeza más desesperada o incluso la alegría más radiante.
Estos cambios bioquímicos dependen de múltiples factores. Por ejemplo, las depresiones de tipo endógeno donde el nivel de serotonina es bajo conducen a un estado de vulnerabilidad, anhedonia y depresión permanente.
En cuanto a las depresiones exógenas, dependen de otras dimensiones, ligadas así a lo que nos rodea, pero también en la forma en que afrontamos la vida cotidiana y las adversidades, grandes y pequeñas. Además, sabemos que la depresión está ligada a ciertos aminoácidos y a la conjunción de ciertos neurotransmisores. Este es el caso, por ejemplo, de la serotonina, la dopamina y la noradrenalina.
Por lo tanto, la química del cerebro determina nuestro estado emocional. No obstante, ya se trate de una depresión endógena o exógena, acudir a un psicólogo se vuelve imprescindible. Gracias a la ayuda de un profesional especializado, es posible sobrellevar la depresión y reducir los síntomas asociados que nos afectan y limitan en nuestro día a día. كيف تربح المال من الانترنت مجاناً No importa si se trata de un psicólogo presencial o un psicólogo online, ya depende de cómo se sienta cada uno más cómodo para elegir la modalidad que más le conviene.
El psicólogo nos puede ayudar además a comprender las siguientes cuestiones:
Contenido
Contenido
1. Deficiencia de dopamina y depresión
Un nivel bajo de dopamina da como resultado una amplia gama de síntomas muy evidentes: fatiga, apatía, cambios de humor, pérdida de interés por lo que nos rodea y tendencia a la depresión.
La dopamina es uno de los neurotransmisores más importantes para el cerebro: participa en la comunicación de neuronas y células nerviosas. Sabemos que tiene una función indispensable a la hora de generar nuestros movimientos, nuestra motricidad y la energía (o motivación) para entrar en relación con nuestro entorno.
¿Cómo aumentar naturalmente el nivel de dopamina?
Hay un aminoácido esencial para aumentar la dopamina, y es la fenilalanina. Nuestros cuerpos no pueden sintetizar fenilalanina de forma natural, por lo que, es necesario obtenerla a través de los alimentos. La fenilalanina se convierte en tirosina que a su vez genera la producción de dopamina. لعب بوكر
Puedes obtener este aminoácido con los siguientes alimentos:
- La carne
- Los productos lácteos
- Frutos secos como almendras y nueces
- Semillas (sésamo, girasol, calabaza)
- Plátanos
- Remolacha
- El chocolate
- Té verde
- El jugo de arándanos
- Jugo de noni
Asimismo, practicar meditación o deportes moderadamente también ayuda a equilibrar la química cerebral.
2. Serotonina, la hormona de la felicidad
De hecho, la gran mayoría de los antidepresivos actúan de la siguiente manera: evitan que muchos inhibidores ralenticen la producción de serotonina. Los niveles bajos de serotonina provocan estrés, depresión, la aparición de pensamientos negativos y sentimientos de desesperanza. مواقع القمار
Es por esto que determinados psicofármacos tienen como objetivo promover la producción adecuada de este neurotransmisor. Sin embargo, es importante tener en cuenta que nosotros mismos también podemos estimular naturalmente la producción de serotonina.
¿Cómo aumentar el nivel de serotonina?
Para lograr esto, lo principal es mejorar tu dieta comiendo más plátanos, chocolate amargo, aguacates, pollo, sandía, arándanos, leche (los mismos alimentos que necesitas comer para aumentar los niveles de dopamina).
Además, también es fundamental practicar una nueva actividad: clases de pintura, clases de baile, yoga… Escuchar música también es una gran opción, ya que las emociones positivas generadas por la música promueven el equilibrio adecuado de la química cerebral.
3. Para equilibrar la química del cerebro y evitar la depresión, necesitas dormir bien
Un descanso insuficiente, despertarte mucho por la noche o tardar demasiado en conciliar el sueño tienen muchas consecuencias. Una de ellas es el descenso de los niveles de serotonina, que, como ya sabemos, trae como consecuencia fatiga, mayor sensibilidad al estrés y riesgo de depresión.
Dormir bien es esencial para la salud y es una forma de equilibrar la química del cerebro para que los neurotransmisores se regulen y promuevan un estado emocional más fuerte, positivo y resistente.
¿Cómo dormir mejor para cuidar la salud de tu cerebro?
- Ten una rutina específica: cenar y acostarte a la misma hora todos los días.
- Dos horas antes de acostarte, reduce tu exposición a los dispositivos electrónicos, es decir, apaga el ordenador, el teléfono, la tablet…
- Haz ejercicio por la tarde, pero nunca antes de acostarte..
- Sigue el mismo ritual a la hora de acostarte: una ducha caliente, un vaso de leche con miel, un libro y relájate en la cama.
- Asegúrate de que la temperatura en el dormitorio sea la adecuada: tanto el calor como los olores fuertes afectan nuestro descanso.
En conclusión, regular y equilibrar la química cerebral para tratar la depresión no solo depende de la medicación, algo esencial es la psicoterapia y la consciencia de que está en nuestras manos poder sentirnos mejor. Si quieres salir de este túnel, necesitas utilizar estrategias más psicológicas y personales, además de adoptar hábitos de vida adecuados como los que te hemos aconsejado.